El ataque es iniciado por los chilenos por el flanco isquierdo y centro, con las divisiones de Amengual y Barceló, estos son replegados por los valientes aliados al mando de Camacho, provocándoles muchas bajas. En eso contraatacan la caballería chilena, la 3ra division y la reserva de Muñoz haciendo que se retiren. En el ala derecha la lucha es con menos fuerza. Los batallones “Zepita” y “Huáscar” luchando con ímpetu y energía, al igual que los bolivianos del “Colorados” y “Amarillos”, en contraste con la desaparición de la caballería boliviana que no participó.